Miles de cristianos se reúnen durante estas épocas en Jerusalén a celebrar sus Fiesta de los Tabernaculos.
En un evidente cumplimiento de la profecía de Zacarías Profeta de Dios, alrededor de 5.000 cristianos evangélicos de más de 90 países llegaron a Jerusalén para compartir la fiesta de Sucot, que empezó el domingo 16 de octubre.
En lo que se ha convertido en una tradición de peregrinación anual, miles llegaron a estar en la 37ª anual Fiesta de los Tabernáculos y la celebración de conferencias, organizado por la Embajada Internacional Cristiana en Jerusalén (ICEJ).
El festival de tiene una semana de duración, realizado a partir de octubre 16-21.
La conferencia es paralela con la semana de vacaciones de Sucot, que, que para los judía, tiene importancia para todas las naciones del mundo. Durante las vacaciones, un total de 70 toros fueron llevados al templo para el sacrificio.
Este año, a la visperas de la votación de la UNESCO la semana anterior donde se pretendía separar a Israel de Jerusalén, la conferencia adquiere un matis más urgente.
La conferencia de este año contará con varias docenas de cristianos pro-Israel parlamentarios y funcionarios gubernamentales de más de veinte países.
Muchos de estos funcionarios visitantes están afiliadas a la Fundación Israel aliados, mientras que varios países africanos están enviando delegaciones gubernamentales para representar a sus países en la fiesta de este año.
El ICEJ también será el anfitrión del más grande y jamás visto grupos de peregrinos de chino y de países de habla hispana, continuando con la tendencia en los últimos años de aumentar la asistencia de América Latina y Asia.
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