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“Fridays at heaven”, o “Viernes en el cielo”: ese fue el nombre que dio a la presentación light del viernes 7 de abril la discoteca Teatre Sant Cugat-Night Scene, en la localidad de barcelona de Sant Cugat del Vallès.
El propósito era ambientar en la Semana Santa esa celebración, dirigida a un público joven a partir de 16 años. Y así se dio, con la consecuencia de que, según ha sabido El Confidencial Autonómico, acabó desatando una fuerte polémica entre algunos asistentes y personas que se han enterado lo que ocurrió en ese sitio.
Procesión con nazarenos en una Disco
El establecimiento decoró el interior como si se tratase de una iglesia, con una fachada de piedra, vidrieras, cuadros… En una ocasión dada, y tal y como se puede observar en el vídeo más abajo, comenzó por la pista una procesión, personificación de soldados romanos, nazareños con sus uniformes de la época, y sobre todo, un hombre disfrazado de Jesucristo, con túnica blanca, corona de espinas y cargando una gran cruz.
Caminando por la pista con música similar a la sacra, el personaje que hacía de Jesucristo comenzó a bailar al ritmo de una melodía mucho más marchosa y moderna, siempre aferrado a la cruz. Algunos de los asistentes se escandalizaron al presenciar cómo el “Jesucristo” bailaba reggaeton, e incluso, según sus palabras, “hacía petting” con el símbolo cristiano la cruz.
Muchos de los asistentes y enterados de lo acontecido y se sintieron ofendidos se dieron la tarea a través de una campaña de recogida de firmas en Change.org para denunciar los hechos y exigir que no se repitiera esa segunda noche: “Lo que ha acontecido es una burla hacia la religión cristiana, hacia sus creyentes y a lo que realmente encierra la celebración de Semana Santa. Pero es más que un agravio religioso. Es cuestión de respeto hacia un grupo de personas”.
Es de tener en cuenta que en Sant Cugat y en los alrededores hay un buen número de instituciones educativas de carácter religiosos, algunos de cuyos alumnos estaban presentes en dicha fiesta.
Protestas de los padres y cancelación del segundo evento
Muchos padres de familias de los menores que estuvieron allí se han puesto en contacto con los administradores de la discoteca Teatre para protestar. Han publicado mensajes de queja en el perfil de Facebook, pero también han hecho lo mismo por WhatsApp, han enviado correos electrónicos y se contactado por por teléfono para denunciar el espectáculo patético y ofensivo, expresión de de algunos de ellos.
Un portavoz de la discoteca Teatre, asegura que durante estos días han buscado la forma de responder y disculparse con todos aquellos que se han puesto en contacto con ellos para protestar por el evento.
Además, menciona que en la fiesta no hubo nadie que se marchara del lugar como protesta por representar esa parodia de procesión, incluso señala que fue una de las fiestas con más asistencia de los últimos años, e incluso señala que la persona que personificó a Jesucristo no bailó reggaetón, sino otro tipo de música.
En conclusión, los responsables de esta discoteca decidieron ante la polémica suscitada anulando la segunda sesión en el establecimiento nocturno, ambientada en la Semana Santa. Dijeron en comunicado que no era nuestra intención ofender a nadie, asegura un portavoz, que enfatiza que no había ningún objetivo de mofarse de nadie ni de la religión católica ni de la Semana mayor. Y añaden que durante cuatro años trabajando en Sant Cugat, enfocandocee a eventos con causas sociales y solidarias.